El tigre negro, el más feroz y vigoroso de los animales de la selva, buscaba un lugar para construir su casa y lo encontró junto a un río.Al venado blanco, el más tímido y frágil de los animales de la selva, le pasó cosa igual, eligieron el mismo lugar: un hermoso sitio, sombreado de árboles y con abundante agua.
Al día siguiente, antes de que saliera el sol, el venado blanco abatió el herbazal y cortó los árboles.Después marchóse y llegó el tigre negro que al ver tales aprestos, exclamó
-Es Tupa (el dios de la selva) que ha venido a ayudarme . . .
Y se puso a trabajar con los árboles cortados
Cuando el venado blanco llegó al día siguiente, exclmó a su vez:
-¡Qué bueno es tupa: ha venido a ayudrame! . . .
Techó la casa, la dividió en dos habitaciones y se instaló en una de ellas.
Cuando llegó el tigre negro y vio la casa terminada, creyó que ello era obra de tupa y se instaló en la otra habitación.Pero al día siguiente se encontraron al salir, comprendiendo entoncesw lo ocurrido.El venado blanco dijo:
-Ha de ser tupa quien ha dispuesto que vivamos juntos.¿Quieres que vivamos juntos?
El tigre aceptó:
-Sí, vivamos juntos.Hoy iré yo a buscar la comida y mañana irás tú . . . .
Se fue por el bosque y regresó a la media noche, cargando un venado rojo, que arrojó ante su socio deciéndole:
-Toma: haz la comida.
El venado blanco, temblando de miedo y de horror preparó la comida, pero ni probó ni un bocado de ella.Tavía más: nis si quiera durmió toda la noche.Temia que su feroz compañero tenga hambre.
Al día siguiente le tocó al venado blanco buscar la comida y se fue por el bosque.¿Qué haría?Encontró un tigre dormido, un tigre más grande que su compañero, e imaginó un plan. Bucó al oso hormiguero, que es muy forzudo, y le dijo:
-Allí hay un tigre dormido.Estaba diciendo que tú no tienes fuerzas . . . .
El oso hormiguero fue calladamente hacia el tigre, lo apretó contra su poderosos brazos y lo ahogó.
El venado blaco arrastró al tigre muerto hasta la casa y dijo, poniéndolo ante los pies de tigre negro, despreciativamente:
-Toma, come : eso el lo poco que pude encontrar . . . .
El tigre negro no dijo nada, pero se quedó lleno de recelo.No comió nada tampoco.En la noche no durmió ninguno de los dos.El venado esperaba la venganza del tigre, mientras que este temía ser muerto por el venado.
Ya de dí los dos estaban de sueño el venado choco su cabez con la madera y el tigre creyó que su compañero lo iba a atacar y salio rapido de la casa asiendo escuchar el sonodo de sus garras el venado al escuchar esto salio rapido igual de la casa y al final la casa se quedo sola.